Atravesando el norte de la Patagonia, este trayecto cruza 1.000 kilómetros de enormes lagos, fiordos y ríos. Existen panoramas de selva, glaciares y escarpados picachos que evocan la imagen de la tierra en formación. Por sus condiciones, en esta zona se crearon áreas privilegiadas para la pesca, afloramientos de aguas termales y deportes aventuras, además se puede observar variadas faunas con más de 23 especies de aves y mamíferos, numerosos parques nacionales y reservas naturales.